La pequeña de 10 años desapareció de su casa y fue hallada horas después con señales de tortura, abuso sexual y un disparo de escopeta.
Su hermana de 11 años, con quien dormía en la misma habitación, fue quien alertó a la familia de la ausencia de la menor, en la madrugada del viernes 22 de diciembre, en el sector de Mayoyoque, Puerto Guzmán.
Policía capturó al presunto violador y asesino de la niña, cuya identidad aún no ha sido revelada.
“Eso es algo que no debería pasar acá en Colombia, pero está pasando cada nada”, opinó Flor Ordóñez, residente de Florencia, Caquetá, en donde fue sepultado el cuerpo de la menor.
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