

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
El caso por el asesinato de los músicos colombianos Bayron Sánchez Salazar, conocido como DJ B-King, y Jorge Luis Herrera Lemos, DJ Regio Clown, dio un nuevo giro con la captura de cuatro personas en el Estado de México, quienes habrían tenido participación en el crimen ocurrido entre el 16 y 17 de septiembre. La novedad en la investigación llega tres semanas después de ser hallados los cuerpos desmembrados el pasado 22 de septiembre en un paraje de Cocotitlán, a un costado de la carretera México-Cuautla, tras ser reportada su desaparición en la Ciudad de México.
Según información conocida por El País y El Universal de México, los detenidos fueron identificados como Angélica Irais “N”, Luis Alberto “N”, José Luis “N” y Jaime “N”, y permanecen privados de la libertad en el penal de Chalco, luego de que un juez los vinculara a proceso por homicidio calificado, al haberse cometido mediante decapitación y desmembramiento.
De acuerdo con El Universal, el juez, del Poder Judicial del Estado de México, determinó que existen indicios mínimos que relacionan a los implicados con los hechos. La autoridad judicial otorgó dos meses para el cierre de la investigación, periodo durante el cual los cuatro permanecerán recluidos. Por su parte, la Fiscalía del Estado de México considera a los imputados como “cooperadores” de los crímenes, mientras se recogen más elementos probatorios que permitan establecer si tuvieron una participación directa.
El contexto de las detenciones actuales también incluye a cuatro ciudadanos colombianos capturados previamente —Yuli Catherine Felicidad Zapata, Yónier Alexánder Mantilla Gómez, Samuel Leandro Quintero Ruiz y Juan Fernando Córdoba Rendón—, quienes, según denunciaron sus familiares a W Radio y Poder Informativo, fueron presentados como culpables sin pruebas y habrían sido víctimas de tortura. El País de México conoció que, hasta el momento, las carpetas judiciales de los colombianos corresponden al delito de extorsión, aunque la Fiscalía mantiene abierta la posibilidad de vincularlos al homicidio de los músicos.
Se debe recordar que, según los registros oficiales de la Comisión de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México, Bayron Sánchez y Jorge Herrera fueron vistos por última vez en un gimnasio de Polanco, en Ciudad de México. Sánchez, un conocido reggaetonero colombiano, había viajado desde Medellín a la capital mexicana el 12 de septiembre y el 14 habían actuado al sur de la capital en un show de Herrera, quien lo había contratado para el mismo. Dos días después, tras avisar que asisitirían a una reunión, abordaron un vehículo por aplicación y luego el Mercedes Benz gris, con destino al Estado de México. Sus cuerpos fueron encontrados el 17 de septiembre en un paraje de Cocotitlán, junto a la carretera México–Cuautla, en una zona sin vigilancia cercana a Tlalmanalco.
Publicidad
El proceso investigativo de la Fiscalía se concentró las últimas semanas en rastrear el vehículo involucrado, el cual habría sido el último lugar donde fueron vistos con vida los dos artistas. Según las últimas actualizaciones del caso, los capturados más recientes y especialmente el hombre identificado como Jaime “N”, de 62 años, están siendo señalados de haber facilitado el vehículo Mercedes Benz gris en el que los dos artistas fueron trasladados desde Polanco, en Ciudad de México, hasta el Estado de México, donde posteriormente fueron encontrados sin vida.
En el proceso se destacó también el hallazgo de un vaso de la cadena Starbucks dentro del vehículo, que contenía un pitillo con restos de saliva y ADN pertenecientes a Bayron Sánchez, lo que, conforme las pruebas de genética, permitió confirmar que el cantante estuvo en ese automóvil. El País de México precisó que sobre el vaso había un papel con el nombre de una persona y la fecha “16 de septiembre”, el último día en que los artistas fueron vistos.
El automóvil se convirtió en el eje de la investigación. De acuerdo con la imputación de la Fiscalía, antes de que el Mercedes Benz fuera hallado en un predio abandonado, cámaras de seguridad lo localizaron en un taller de hojalatería del municipio de Los Reyes La Paz, al oriente del Estado de México, donde se habrían pintado de rojo los rines para alterar su apariencia. En el lugar, las autoridades hallaron el bote de pintura y las brochas con las que, presuntamente, se realizó la modificación. En la misma diligencia fue detenida Angélica Irais “N”, señalada como administradora del taller, junto con Luis Alberto “N” y José Luis “N”.
Publicidad
Según conoció El País, las investigaciones sitúan a los cuatro imputados dentro de una posible estructura delictiva vinculada con la Unión Tepito, una organización que opera en la capital mexicana y zonas aledañas. Una testigo protegida relató a las autoridades que un hombre conocido con el alias de “El Puga”, a quien se atribuyó la identidad de Jaime “N”, acudía a ese taller a reparar vehículos y que junto con José Luis “N” serían parte de un grupo denominado “los pesados de la zona”, dedicado a la venta de drogas en Los Reyes La Paz y Nezahualcóyotl.
Jaime “N” , por su parte, niega tener relación con esas personas y asegura que su detención fue irregular. Su abogado, Ángel Carrera, declaró a El País de México que su cliente fue víctima de un montaje judicial. “La Fiscalía intenta crear culpables para quitarse la presión mediática e internacional que ha atraído el caso”, señaló. Carrera explicó que su representado se dedica desde hace más de 20 años a la compra, reparación y venta de automóviles siniestrados, y que el Mercedes Benz implicado fue uno de los vehículos que pasaron por sus manos.
Según el abogado, el coche pertenecía originalmente a una fábrica de pinturas en el Estado de Puebla y, tras un siniestro, fue adquirido por la aseguradora Atlas. Posteriormente, Jaime lo habría comprado y vendido en mayo a un tercero, a cambio de una motocicleta y dinero en efectivo. “La Fiscalía tiene la información de que lo compró, pero lo vendió en el mes de mayo. De hecho, le dieron una moto y dinero en efectivo por la transacción, solo que no han encontrado la responsiva. Tiene los datos de a quién se lo vendió”, dijo Carrera al diario mexicano, aunque admitió no haber presentado aún los documentos que lo acrediten.
El abogado afirmó que no pudo incorporar esa evidencia durante la primera audiencia, pero lo hará dentro de la investigación complementaria. De acuerdo con El País, Jaime fue detenido el 27 de septiembre en Nezahualcóyotl, tras regresar de Acapulco, donde había pasado unos días con su familia. Su esposa e hijos relataron que el arresto ocurrió cuando seis camionetas con hombres encapuchados, vestidos de negro y con armas largas, interceptaron su vehículo cerca de su casa. Denuncian que los agentes pusieron droga en la guantera para justificar la detención y posteriormente lo trasladaron a la Fiscalía de Nezahualcóyotl.
Publicidad
Carrera sostuvo que la aprehensión de su cliente repitió un patrón que ya había ocurrido con cuatro ciudadanos colombianos detenidos semanas antes por el mismo caso. “Así les hicieron a los colombianos. Los dejan salir caminando y a media cuadra los detienen. Se burla la ley mediante esas astucias de la Fiscalía. Ese es el modo de operar siempre. Te cargan con droga, o con un arma, o te dicen que tu carro está remarcado. Justifican una detención, después simulan un cohecho, y posteriormente te ponen a disposición por una orden de aprehensión”, dijo.
Durante los días en que permaneció bajo custodia, se le abrieron tres carpetas de investigación: una por menudeo de drogas, otra por cohecho y una tercera por el homicidio de los dos artistas colombianos. “Lo hicieron sin ningún dato, prueba o indicio que lo vincule al homicidio, lo que viola sus garantías. Nunca precisan el tiempo, modo y lugar del supuesto hecho. El Ministerio Público dice que no pueden ser autores materiales, pero que sí hubo un acuerdo anterior para que se cometiera el homicidio sin que se precise con quién ni cuándo ni cómo”, añadió su abogado.
Publicidad
El caso de Jaime “N” se conecta con la línea de investigación sobre el automóvil gris que fue visto en cámaras de seguridad transportando a los músicos desde Polanco hacia Iztapalapa. Según El País de México, el vehículo fue hallado el 24 de septiembre durante un cateo en una vivienda abandonada en Tepetlaoxtoc, Estado de México. La Fiscalía sostiene que ese fue el mismo carro en el que se movilizaron las víctimas el 16 de septiembre, día en que desaparecieron.
Paralelamente, se debe recordar que una de las primeras personas interrogadas fue Angie Miller, modelo venezolana conocida por su cercanía con B-King. Ella había sido reportada como desaparecida, pero posteriormente fue localizada y llamada a declarar. Según el noticiero Crystal, la mujer aportó nombres que orientaron la investigación hacia una red criminal denominada “Los pesados de Los Reyes y Neza”, la cual estaría relacionada con la Unión Tepito.
Hasta ahora, el juez del caso mantiene la medida de prisión preventiva para los cuatro nuevos procesados, mientras se desarrolla la investigación complementaria. La Fiscalía dispone de dos meses para reunir nuevas pruebas que determinen si Angélica Irais “N”, Luis Alberto “N”, José Luis “N” y Jaime “N” participaron de manera directa en el asesinato de los dos músicos colombianos, o si solo actuaron como colaboradores.
LAURA NATHALIA QUINTERO.
NOTICIAS CARACOL DIGITAL.