En el más reciente caso, un mototaxista fue asesinado en San Vicente del Caguán. Puerto Rico y El Doncello tampoco se salvan de delincuencia. Informe especial.
Según Arcesio Garza Correa, ahora las organizaciones delincuenciales actúan a sus anchas y sin control.
“Las bandas ya no tienen ninguna clase de miedo, porque antes los pelaban. ¿Quién les va a decir algo si no está la gente que los controlaba antes?”, cuestiona Garza.
“Después de la zona de concentración se esperaba que fuéramos a vivir una paz total. Por el contrario, la violencia se ha incrementado, ese espacio que dejó las FARC ha sido ocupado por dos grupos: el grupo disidente y el otro que es la delincuencia común organizada que viene de otros pueblos a delinquir”, dice el concejal Eduardo Cedeño de San Vicente del Caguán.
En esa población, en lo corrido del año ya van 33 personas asesinadas. En el resto del departamento, los homicidios suman 73.
“Lo que se ha producido con la salida de las FARC es lo que denominados la anarquía criminal”, opina el analista Ariel Ávila.
“Las FARC ejercían una acción criminal sobre los territorios: cobraban extorsión, reclutaban y sostenía combates con la fuerza pública, pero había un sistema paraestatal que ellos montaron. Era un sistema de regulación social”, añade.
El comandante de la brigada XII del Ejército, general César Parra, asegura que sus tropas ejercen control en la zona y que ningún grupo criminal ha ocupado los espacios dejados por las FARC.
Campesinos de la zona piden fortalecer las juntas de acción comunal con el fin de que el tejido social crezca y se puedan articular acciones efectivas contra los violentos.
Updated: junio 06, 2017 03:25 p. m.