En Colombia, los conflictos por herencias siguen cobrando vidas. El caso del comerciante John Freddy Castiblanco, asesinado en el sur de Bogotá el 17 de junio de 2024, conmocionó al país cuando se reveló que el presunto responsable era su propio hermano. La historia, presentada por Séptimo Día en septiembre de 2024, expuso una dolorosa realidad: la ambición puede acabar en una tragedia, incluso entre familiares.Diana Arango, esposa de John Freddy y madre de sus tres hijas, fue quien encontró el cuerpo sin vida de su esposo. “Cuando yo llego lo encuentro ahí tirado. Ya mi esposo había fallecido y la Policía me explica que lo habían asesinado”, relató.La tragedia se volvió aún más dolorosa cuando Diana comenzó a sospechar que el asesino estaba dentro de su propia familia. “A mí se me vino a la cabeza el hermano. Para mí él es el sospechoso”, dijo, refiriéndose a Benedicto Castiblanco, hermano menor de John Freddy.Una difícil relación entre hermanosSegún Diana, los hermanos nunca tuvieron una relación cercana. “Ellos como hermanos siempre fueron distantes porque como mi esposo él era el mayor, Benedicto tenía su complejidad de inferior”, explicó. La tensión entre ellos se intensificó tras la muerte de su padre en 2016, quien no dejó testamento. La disputa por la herencia se concentró en una casa con seis locales comerciales, que generaba ingresos mensuales de aproximadamente $8 millones de pesos.John Freddy, como hijo mayor, delegó a Benedicto la administración de los arriendos. Pero según Diana, su cuñado vio en esa responsabilidad una oportunidad para vivir sin trabajar. “Como este tipo no se dedicaba a nada, él dijo a ‘aquí gano’. Entonces, siempre tuvo ese pensamiento de vivir y de sostenerse con lo que dejó su papá”, afirmó.La amenaza que anticipó el crimenEl día del asesinato, John Freddy tuvo una fuerte discusión con su hermano. Diana recuerda que su esposo le confesó que él lo había amenazado. “Me dijo que el hermano lo había amenazado de muerte y por ahí empezó la investigación”, relató.La Policía Metropolitana de Bogotá recolectó pruebas clave para la investigación, como los videos de cámaras de seguridad que mostraban al agresor. El subintendente Camilo García, líder de la investigación, explicó cómo identificaron al sospechoso. “Ya cuando nos entrevistamos con el familiar, que es la esposa del señor Freddy, le mostramos unos videos en los cuales ella nos dice, ‘sí esa persona yo la conozco y esa persona es el hermano de John Freddy’”.Benedicto Castiblanco fue capturado el 27 de julio de 2024, cerca de su vivienda en el mismo barrio donde ocurrió el crimen. “¿Cuál es el motivo que ustedes establecen que llevó a Benedicto a asesinar a su propio hermano? Por la ambición del dinero y por los problemas que tenían a raíz de la casa que les dejó su papá”, explicó el subintendente García.Para Diana, la causa del asesinato fue clara. “Para mí el motivo es el signo pesos, por avaricia, por querer más que el otro, por yo tengo más derecho que este”, afirmó.La Fiscalía le imputó cargos por homicidio agravado. Benedicto aceptó su responsabilidad y pidió perdón públicamente. “Quiero pedir perdón a mi familia, la familia de él, la embarré, destruí todo. No sé qué voy a hacer para poder redimir todo lo que hice mal”, dijo.La condena que no dejó satisfecha a la familiaCuatro meses después de la emisión del programa Séptimo Día, el 22 de enero de 2025, se conoció la sentencia. Benedicto Castiblanco fue condenado a 17 años y 11 meses de prisión, tras recibir una rebaja del 50 por ciento por aceptar cargos.Para Isabela, la hija mayor de John Freddy, la condena fue insuficiente. “Se nos hizo a nosotros injusto porque se redujo a la mitad la condena después de lo que hizo, después de que nos quitó básicamente la columna de nuestro hogar”, expresó. La joven también reveló que su madre está profundamente afectada emocionalmente y no tuvo fuerzas para dar una entrevista a Séptimo Día.Además de la condena penal, la familia espera una reparación económica. Sin embargo, Giovanni Duque, quien representa las víctimas, denunció que Benedicto intentó evadir sus responsabilidades. “Él tenía la prohibición de enajenar bienes y esta persona procedió a hacer una venta de derechos herenciales en favor de su compañera permanente o pareja sentimental actualmente”, explicó.Ante esta situación, el abogado anunció que interpondrán una demanda civil contra Benedicto. La familia exige que se les reconozca su parte en los arriendos de la casa heredada, pero según Isabela, eso no ha ocurrido. “No nos han reconocido en nada de arriendos de la casa. Todo lo contrario, la persona que está en la cárcel es quien está recibiendo y quién está viviendo de eso y quieren que mi mamá pague deudas”, denunció.El dolor por el asesinato de John Freddy Castiblanco aún persiste. Para sus hijas, el crimen les arrebató la posibilidad de crecer junto a su padre. “Jamás podremos perdonar que nuestro propio tío nos haya quitado el derecho de tener a nuestro papá”, expresó Isabela.La familia pide que Benedicto cumpla la totalidad de su condena en la cárcel sin ningún tipo de beneficio.
La noche del 21 de septiembre de 2024 marcó para siempre la vida de la familia de Yeimis Daniela Vargas, en Cimitarra, Santander. La joven, de 19 años, disfrutaba de una salida con amigos cuando se convirtió en víctima mortal de un ataque que quedó registrado por cámaras de seguridad. Horas después, la señalada homicida se presentó voluntariamente ante la Policía, pero no fue capturada.Según relataron sus padres en Séptimo Día, Yeimis Daniela estaba en una discoteca compartiendo con sus amigos cuando comenzó a recibir mensajes y audios de Nicoll Alexandra Torres, quien la citaba en el barrio Los Pinos. “Llegue a mi casa, ¿qué es lo que es? ¿Cuál es su bobada?”, se lee en uno de los mensajes.De acuerdo con los padres de Yeimis Daniela, en los mensajes que recibió fue citada, por lo que acudió al lugar alrededor de las 3:00 de la madrugada. Las cámaras de seguridad registraron el momento exacto en que se produjo la agresión entre las dos jóvenes. En las imágenes también se observa a otra mujer, quien sería la pareja de Yeimis, intentando detener a la agresora.Según el padre de Yeimis Daniela, Nicoll Alexandra había sostenido una relación con la actual pareja de su hija. Lo que había desatado la riña entre ambas jóvenes. Una riña terminó en tragediaNicoll Alexandra causó graves heridas con un arma cortopunzante a Yeimis, quien fue trasladada de inmediato al hospital más cercano. Los médicos intentaron salvarle la vida durante varios minutos, pero debido a la gravedad de las heridas, falleció.“Me quitaron la vida entera...Le cuento que vivimos muy decepcionados”, contó Consuelo Garavito, madre de Yeimis. “Como cualquier persona, mi hija le gustaba el baile… pero son cosas injustas en la vida. Y a ella le tocaron personas malas”, lamentó su padre, José Wilson Vargas.Esa madrugada, en Cimitarra, muchos habitantes ya sabían quién era la presunta responsable del crimen de Yeimis Daniela. Las grabaciones de las cámaras de seguridad y los testimonios recopilados por las autoridades señalaban a Nicoll Alexandra Torres, quien no pudo ser capturada porque había abandonado el lugar.La señalada se entrega y queda libreLa investigación reveló que, en cuestión de horas, la presunta responsable del ataque se presentó en la estación de Policía del municipio acompañada de su abogado. Pese a que era señalada por testigos y familiares, y a que el hecho había ocurrido pocas horas antes, no fue detenida. Pero, ¿por qué?“Tenemos dos situaciones para capturar a una persona: cuando existan situaciones de flagrancia o cuando exista una orden judicial expedida por un juez. En este evento no se presentaba ninguna de estas situaciones”, explicó en ese momento el intendente.Por lo tanto, al no existir una orden de captura, la mujer fue dejada en libertad, pese a haber confesado el crimen. La investigación de la SIJIN continuó, pero fue un mes después de los hechos cuando se expidió la orden de captura contra Nicoll Alexandra. Para entonces, ella ya había salido del país. “Se procedió a hacer las solicitudes con urgencia y solicitar una circular azul para esta persona que tiene ese requerimiento judicial”, explicó la Policía.No obstante, durante meses, la familia de Yeimis Daniela no tuvo noticias sobre el avance del caso. La incertidumbre y el dolor se incrementaban con cada día que pasaba sin que la presunta homicida fuera ubicada.Giro en el casoEl 26 de febrero de 2025, cinco meses después del crimen, la Policía capturó a Nicoll Alexandra Torres en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, cuando arribó en un vuelo procedente de Denver, Colorado, Estados Unidos. Le imputaron el delito de homicidio agravado.La mujer aceptó un preacuerdo con la Fiscalía, lo que redujo su condena a la mitad, un hecho que dejó consternada a la familia de la víctima. Finalmente, fue sentenciada a 8 años y 6 meses de prisión. “Eso ni el 50% siquiera… Ella era prófuga, ya se había ido del país. ¿Qué beneficios tiene una persona así?”, mencionó el padre de la víctima, indignado con la decisión.“Es muy poquito tiempo. Parecen que hubieran matado un animalito y no debía haber sido ese tiempo que le dieron de condena, tenía que haber pagado más”, cuestionó Consuelo, madre de Yeimis Daniela.El caso de Yeimis Daniela abrió un debate sobre los beneficios judiciales que reciben las personas procesadas por homicidio al aceptar cargos. Aunque la intención de estas medidas es agilizar procesos y descongestionar el sistema judicial, en crímenes violentos como este generan profundo dolor e indignación, según la familia de la víctima.En la emisión del programa se evidenció que este caso no es un hecho aislado. Otros homicidas también han aprovechado el mismo vacío legal para evadir la justicia. Para la familia Vargas, no hubo una condena justa y el dolor por la pérdida de su hija sigue vivo en su memoria. Por ello, luchan para que ninguna otra familia tenga que atravesar el mismo sufrimiento.
Desde que el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay fue víctima de un atentado mientras se encontraba en un mitin político, el 7 de junio de 2025, en el parque El Golfito, del barrio Modelia, occidente de Bogotá, la vida de su familia cambió para siempre. Su esposa María Claudia Tarazona contó en Los Informantes cómo enfrentaron los momentos más duros.Con el alma rota, pero sostenida por la fe, María Claudia Tarazona relató en entrevista con María Elvira Arango, directora de Los Informantes, que desde que llegó a la Clínica Medicentro, en la que le prestaron la primera atención a su esposo, hasta que lo trasladaron a la Fundación Santa Fe le recordó con amor lo importante que era para su familia y le pidió luchar por su vida.En la ambulancia hacia la Fundación Santa Fe “el neurocirujano le iba teniendo el cuello y ayudándolo sostener y yo le iba diciendo, ‘Miguel, no te mueras, tenemos que llegar, tienes que ver a tu hijo, lo tienes que volver a abrazar. Vuelve a mí, no te vayas, quédate conmigo’ Y lo logró”, contó.Una promesa eternaEsas primeras 48 horas fueron clave para Miguel Uribe Turbay. El senador fue sometido a una primera cirugía y sobrevivió, pero poco después a su esposa María Claudia Tarazona le dijeron que la condición era tan crítica que podrían quedarle solo algunas horas de vida. Con ese diagnóstico, devastador y definitivo, María Claudia reveló que tomó una decisión difícil, la de preparar a sus hijas para despedirse: “Les dije ‘Miguel no lo logró, Miguel se va a morir. Mándenle un mensaje a Miguel’. Muy importante el poder despedirse”.Ellas grabaron unos audios y ella los llevó a la clínica para despedirse de Miguel: “Me acuesto encima de él y le digo ‘amor lindo, hiciste un trabajo maravilloso… vete tranquilo… yo voy a estar aquí para Alejandro… te voy a ir a buscar y va a haber una segunda oportunidad para ti y para mí’”.En medio del dolor, desde ese momento le hizo una promesa a su esposo: que cuidaría de sus hijos, especialmente a Alejandro, el menor. “Lo voy a cuidar con todas las fuerzas de mi corazón y cuando Alejandro tenga hijos y sus hijos tengan hijos y esos hijos vayan a tener hijos, te voy a ir a buscar y va a haber una segunda oportunidad para ti y para mí. Vete a buscar los brazos de tu mamá que yo me hago cargo”, recordó en la entrevista que el programa Los Informantes publicó el pasado 13 de julio."Tendremos nuestra segunda oportunidad"Aunque tras el dictamen María Claudia se despidió del senador, él siguió batallando por su vida y durante dos meses y cuatro días fue sometido a varias intervenciones quirúrgicas en pro de su recuperación, pero no logró ganarle la batalla a la muerte y este lunes, 11 de agosto, se confirmó el fatal desenlace. Al corroborar la noticia, su esposa reiteró su promesa.En su cuenta de Instagram, en la que constantemente agradeció a sus seguidores por las oraciones por la salud de su esposo, María Claudia Tarazona despidió a su esposo con una foto juntos y un sentido mensaje. “Siempre serás el amor de mi vida. Gracias por una vida llena de amor, gracias por ser un papá para las niñas, el mejor papá para Alejandro. Pido a Dios me muestre el camino para aprender a vivir sin ti”, escribió.E insistió en que cumplirá su palabra: “Nuestro amor trasciende este plano físico. Espérame, que cuando cumpla mi promesa con nuestros hijos, iré a buscarte y tendremos nuestra segunda oportunidad. Descansa en paz amor de mi vida, yo cuidaré a nuestros hijos”, puntualizó María Claudia Tarazona.La muerte de Miguel Uribe TurbayEl senador Miguel Uribe Turbay, uno de los precandidatos para las elecciones presidenciales de 2026, murió este lunes en Bogotá, dos meses y cuatro días después de haber sido gravemente herido en un atentado en la capital cuando arrancaba su campaña.Su grave condición médica, tras recibir dos disparos en la cabeza y uno en la pierna izquierda el pasado 7 de junio, tuvo en vilo al país, hasta que su deceso finalmente se produjo esta madrugada a la 01:56 a.m. en la Fundación Santa Fe de Bogotá donde estuvo ingresado desde el día del atentado.Nacido en Bogotá el 28 de enero de 1986, era hijo del exconcejal conservador Miguel Uribe Londoño y de la periodista Diana Turbay, asesinada el 25 de enero de 1991 en medio de un confuso operativo en el que buscaban su libertad tras haber sido secuestrada seis meses antes cuando cayó en una trampa que le puso Pablo Escobar. Era abogado de la Universidad de los Andes, con maestrías en Políticas Públicas en esa misma institución y en Administración Pública por la Universidad de Harvard. Fue el senador más votado en 2022 de su partido, el Centro Democrático, donde destacó como opositor al presidente Gustavo Petro."Miguel recorrió Harvard Kennedy School con los ojos y el corazón abiertos. Era profundamente optimista sobre el futuro de Colombia, y Miguel estaba comprometido con él", señaló esa universidad estadounidense en un homenaje que le rindió el pasado 18 de junio a su exalumno de la promoción de 2022.
En una entrevista con Los Informantes en 2017, doña Nydia Quintero habló del dolor que le causó el secuestro y posterior asesinato de su hija Diana Turbay, mamá de Miguel Uribe Turbay, quien falleció en la madrugada de este lunes en la Fundación Santa Fe de Bogotá, y María Carolina Hoyos, actual directora de la Fundación Solidaridad por Colombia.Fue el 25 de enero de 1991 cuando, en medio de un confuso operativo, la periodista Diana Turbay murió tras recibir un disparo. Esto ocurrió seis meses después de haber caído en una trampa que le puso Pablo Escobar: el 30 de agosto de 1990, siendo una de las periodistas más prestigiosas de la época, se dejó tentar con la promesa de una entrevista exclusiva al entonces jefe del ELN, el cura Manuel Pérez, pero todo era un plan de los llamados extraditables para retenerla y así presionar al presidente César Gaviria para que tumbara el tratado de extradición de narcotraficantes con Estados Unidos.(Lea también: Exclusivo Noticias Caracol: video revela que sicario que disparó contra Miguel Uribe no actuó solo)Sobre la estela de dolor que dejó el crimen de su hija cuando apenas tenía 39 años, doña Nydia Quintero comentó en Los Informantes que “todos los días le pido a Dios por el alma de Diana y le pido que, si es posible, que ella nos ayude a sus hijos y a nosotros, pero yo nunca sufrí con rabia, ¿ves? Fue con dolor, dolor inmenso, tristeza inmensa, una cosa que, para quienes sean madres o padres y pierdan un hijo y especialmente en forma trágica, es terrible”.Junto a Diana Turbay también fueron secuestrados el camarógrafo Richard Becerra, los periodistas Azucena Liévano, Juan Vitta y Hero Buss (alemán). “Ella cayó y lo primero que dijo fue ‘me mataron, me mataron, me morí’ y se quedó callada, no dijo nada más”, cuenta el camarógrafo Becerra, quien fue compañero de infortunio de Diana hasta el final, sobre sus últimas palabras.Tras recibir ese disparo en medio del operativo, Diana Turbay fue llevada en helicóptero hasta el aeropuerto Olaya Herrera y de ahí trasladada en ambulancia hasta el Hospital General de Medellín, donde murió tres horas después. A las 5:30 de la tarde del 25 de enero de 1991, la periodista dejó de respirar.Su hija, María Carolina Hoyos, tuvo que reconocer el cuerpo: “Fui a verle los pies y los pies por debajo están absolutamente lacerados y cortados. Esa fue la última vez que vi los pies, un código que fue un código de amor durante todos los años que vivimos juntas”.Por su parte, en varias ocasiones, Miguel Uribe Turbay – que lucha por su vida en la Fundación Santa Fe - ha comentado que cuando secuestraron a su madre tenía él “4 años y medio, y cuando muere me faltan 3 días para cumplir 5 años”. Casi coincidencialmente, el hoy senador tiene la misma edad que su mamá cuando falleció y su hijo los mismo 4 años que él tenía cuando la perdió.¿Cómo era Diana Turbay?“Era una persona muy tierna, muy inteligente. Ella fue quien me ayudó a mí a crear la Fundación Solidaridad por Colombia y estuvimos siempre muy juntas, muy unidas en todas las cosas. Yo siento que tengo como un ser, diría yo, como un ser en el cielo a quien le pido a Dios que le permita ayudarnos”, comentó doña Nydia Quintero nostálgica y triste, como cualquier madre que recuerda el dolor de ver partir a un hijo.La historia de Julio César Turbay y Nydia QuinteroLos papás de la fallecida periodista Diana Turbay Quintero tienen una curiosa historia de amor. Julio César Turbay Ayala (presidente del 7 de agosto de 1978 hasta 7 de agosto de 1982) y Nydia Quintero, eran tío y sobrina, se casaron cuando ella apenas tenía 17 años y el 27 y protagonizaron uno de los divorcios más emblemáticos de la época.“Se logró la anulación (del matrimonio) estando aún en la Presidencia de la República y, diría que es de las personas más maravillosas que uno pudiera haber conocido. La única cosa era que era coquetico”, comentó Nydia Quintero. Abogados del presidente acudieron al Tribunal Eclesiástico para pedir la anulación del matrimonio alegando consanguinidad. La demostración de que eran tío y sobrina agilizó las cosas y, con el visto bueno del propio Papa Juan Pablo II, la unión quedó disuelta.Ella se volvió a enamorar, se casó con Gustavo Balcázar. Él se convirtió no solo en su mejor compañía, sino a veces hasta en sus propios ojos.La creadora de la Caminata por la SolidaridadDurante cuatro años, Nydia Quintero fue primera dama de Colombia y también es recordada por ser la creadora de solidaridad por Colombia y de la Caminata de la Solidaridad, un evento que cada año le demostró al mundo y al país de qué tamaño es el corazón y la generosidad de los colombianos.La Caminata por la Solidaridad nació “el primer año de presidencia del doctor Turbay, hubo un desfile en unos camiones, yo fui encima de un camión y la gente era supremamente querida, diciendo cosas queridas, entonces yo me entusiasmé, me pareció una cosa muy linda”, relató la exprimera Dama de Colombia.Durante años, la Caminata por la Solidaridad, con doña Nidya a la cabeza, era una cita imperdible con los personajes más queridos de la farándula y la televisión, que tenía como objetivo recaudar fondos para los más necesitados En 49 años de servicio, la Fundación Solidaridad por Colombia ha beneficiado 67.948 familias y ha entregado 47.794 becas educativas.Ni siquiera el posterior asesinato de Diana Turbay fue motivo para que Nydia Quintero dejara de hacer la Caminata por la Solidaridad. Para septiembre de 2016, le entregó las banderas de la Fundación a su nieta, María Carolina Hoyos, que hasta hoy continúa el legado de su abuela.La muerte de doña Nydia QuinteroEste lunes, 30 de junio de 2025, se confirmó la muerte de Nydia Quintero, exprimera dama de la Nación y abuela del senador Miguel Uribe Turbay. Su nieta María Carolina Hoyos, hermana del senador, quien permanece internado en la Fundación Santa Fe desde el 7 de junio, día en que fue gravemente herido con dos disparos en la cabeza, escribió en redes: “Hoy el cielo recibe a una gigante: la dama de la solidaridad. Gracias por ser mi mamá de la vida, mi refugio cuando perdí a la mía. Dale un abrazo a mi mamá. Qué consuelo saber que ahora están juntas Diana y tú".
La monja colombiana Inés Arango dedicó su vida a servir con humildad y entrega a los demás, convirtiéndose en un símbolo de fe. Durante casi diez años fue misionera en la selva, conviviendo con comunidades indígenas y trabajando por su bienestar. Sin embargo, su labor terminó trágicamente en Ecuador, donde fue asesinada junto al monseñor Alejandro Labaka: 21 lanzas atravesaron su cuerpo, en un ataque de una tribu aislada. La directora de Los Informantes, María Elvira Arango, recordó su vida y su legado, y el camino que hoy la acerca a la santidad.En una sencilla carta de dos párrafos, escrita a mano y atesorada por la hermana Cecilia Arango como un gran tesoro, Inés Arango, su hermana menor, dejó todos sus bienes que no sumaban más de 50 mil pesos, una hamaca que podía servir a los indígenas y, sobre todo, una inmensa lección de grandeza y humildad.“Para ella, su final fue muy alegre, porque en la misma carta que dejó escribió: ‘Si muero, me voy feliz. No busco fama ni nombre. Siempre con todos. Inés’. Ella quería morir entre los indígenas”, relató su hermana, Cecilia Arango.Un deseo que no pudo cumplirse del todo, porque la misionera colombiana Inés Arango, a pesar de que han pasado 38 años desde su asesinato, es conocida en gran parte del mundo. Su vida y su muerte fueron tan excepcionales que hoy avanza en el camino hacia la beatificación.Inés Arango: una vida marcada por la feLa vida de Inés Arango es hoy una fuente de inspiración. Su hermana Cecilia, de 90 años, conserva intactos los recuerdos de quien fue su hermana menor. Guarda con nitidez las vivencias compartidas y las anécdotas que retratan a una mujer sencilla, entregada a su fe y dispuesta a darlo todo por los demás.Su familia, profundamente católica y numerosa, estaba formada por 12 hijos, de los cuales tres se consagraron como monjas. Entre ambas partes de la familia, a lo largo de tres generaciones, hubo cerca de 90 sacerdotes y religiosos.“Era muy alegre y paciente...Le encantaba hablar con la gente, servirle a todo lo que necesitaran”, relató Cecilia desde el Colegio María Inmaculada, en Bogotá, donde aún vive. Desde pequeña, Inés mostró un interés profundo por las misiones y soñaba con dedicar su vida a servir a Dios en lugares remotos.Inés Arango nació el 6 de abril de 1937 en el barrio Belén de Medellín. A los 17 años ingresó a la congregación y a los 22 emitió sus votos perpetuos, comprometiéndose de por vida a vivir en castidad, pobreza y obediencia.Además, pasó varios años enseñando mientras esperaba la oportunidad de convertirse en misionera, justo en un momento en que la Amazonía ecuatoriana estaba atravesando profundas transformaciones.¿Por qué llegó a Ecuador?Durante esa década, la Amazonía ecuatoriana vivía tensiones crecientes por la explotación petrolera y los cambios sociales que esta actividad generaba. Por eso, la Prefectura Apostólica de Aguarico asumió un rol clave en la región, enviando misioneros para acompañar a las comunidades indígenas. Fue allí donde se cruzaron los caminos de Inés y monseñor Labaka.“Todos sabían del riesgo que corrían al estar en ese proyecto. Ellos lo sabían y la gente del entorno, porque concretamente a Inés le preguntan el día anterior: ‘¿No te da miedo?’, y ella decía que no. ‘¿Y si mueres?’, contestaba: ‘Muero donde he querido y he soñado siempre”, reveló Bilma Freire, consejera general de las Hermanas Capuchinas.Inés no dudó cuando finalmente la enviaron a una misión en Ecuador para evangelizar y atender las necesidades de los indígenas, en uno de los lugares más ocultos y alejados de la civilización. Se fue dichosa, impulsada por la promesa de vivir y, si fuera necesario, de morir entre los indígenas, los más olvidados.Durante casi 10 años, ambos convivieron con el pueblo Huaorani, aprendiendo su lengua, costumbres y formas de vida. Inés incluso hablaba quechua y se adaptó plenamente a la cultura local. “La vida religiosa se hizo para servirle a los demás, no para servirse a sí mismo”, afirmó Cecilia.¿Qué ocurrió?El 20 de julio de 1987, el obispo español Monseñor Alejandro Labaka de 67 años, y la hermana Inés, de 50, bajaron de un helicóptero en las profundidades de la selva al oriente del Ecuador, donde iban a ser los primeros acercamientos con los Tagaeri, una comunidad indígena que voluntariamente se ha aislado del mundo moderno. Este pueblo, conocido por su fama de guerreros feroces y no contactados, sigue siendo uno de los grupos más desconocidos y enigmáticos de la región.La tragedia ocurrió después de que el vicariato, tras meses de intensa búsqueda, autorizara el viaje de monseñor e Inés para intentar establecer ese primer contacto con los Tagaeri.Con la bendición de sus superiores y sin saber que sería su último viaje, partieron con esperanza y fe. Afortunadamente, hay un documental, una joya audiovisual de la Red Eclesial de Panamazónica, que capta muy bien las condiciones en las que vivían en la selva.“Primero, mataron a monseñor en presencia de Inés. Para ella fue un doble martirio”, reveló su hermana Cecilia. Los indígenas atravesaron con 84 lanzas al monseñor, quien murió desnudo. Luego, frente a ella, desataron su furia contra Inés, que recibió 21 lanzas. Murió descalza, con la túnica destrozada. Los misioneros no portaban armas; su propósito siempre fue de manera pacífica.Un camino a la beatificaciónPor su legado y su trabajo con los indígenas del Amazonas, así como por el significado que sus vidas y muertes tienen para la Iglesia, ambos siguen vivos en la memoria colectiva y hoy avanzan en el camino hacia la santidad.“El papa Francisco, desde el inicio de su pontificado, ha mostrado preocupación e interés por la Amazonía, y eso hace que Alejandro e Inés sigan vivos, no para una sola porción, para la Amazonía y, ahora, con lo de la venerabilidad, para el mundo entero”, concluyó Bilma Freire, consejera general de las Hermanas Capuchinas.Aunque fueron reconocidos por el papa Francisco, ahora cuentan con la bendición del papa León XIV, quien aprobó el decreto que reconoce sus virtudes heroicas y los eleva a la condición de venerables, el primer paso hacia la beatificación.La tragedia conmovió a la iglesia y al mundo. Para muchos, Inés y Monseñor Labaka encarnaron el máximo ejemplo de entrega misionera, ofreciendo sus vidas por amor a un pueblo que no los conocía y que, finalmente, los rechazó con violencia.“Para los milagros, primero que todo, hay que creer. Hay que tener fe. Es un camino largo, pero no imposible”, explicó Blanca Nidia Bedoya, superiora general de las Hermanas Capuchinas. Para que la beatificación sea oficial, se requiere la verificación de al menos un milagro atribuido a la intercesión de Inés y monseñor.Su eventual canonización sería un hecho histórico para Colombia, particularmente para Antioquia, su tierra natal. “No es lo que nosotros queramos, sino lo que mi dios quiera. Mi Dios sabrá cómo lo hace”, concluyó Cecilia, convencida de que el reconocimiento llegará en el momento indicado.
El periodista palestino Anas al Sharif, uno de los rostros más reconocidos de Al Jazeera en la Franja de Gaza, murió la noche del domingo en un bombardeo israelí de precisión en la Ciudad de Gaza. Tanto las fuerzas armadas israelíes como colegas que cubrían el conflicto confirmaron su fallecimiento.En un comunicado, el Ejército israelí afirmó que Al Sharif era “un terrorista que se hacía pasar por periodista” y que estaba vinculado al grupo islamista Hamás. Sin embargo, no presentó pruebas verificables. Según su versión, dos documentos, cuyo origen no precisó, lo registran como miembro de Hamás desde 2013 y herido en incidentes de 2017 y 2019. Reporteros Sin Fronteras (RSF) ya había advertido en 2024 que estos documentos no constituyen evidencia suficiente ni justifican su muerte.Un testimonio final en redes socialesPoco antes del ataque, Al Sharif publicó en X videos que mostraban la intensidad de los bombardeos cerca del hospital Shifa, acompañados de mensajes denunciando la destrucción y advirtiendo: “Si esta locura no termina, Gaza quedará reducida a ruinas… la historia los recordará como testigos silenciosos de un genocidio”.Al Jazeera informó que el bombardeo alcanzó una tienda de campaña para periodistas ubicada junto al hospital. En el mismo ataque murieron otros tres reporteros: Mohammed Qreiquea (también de Al Jazeera), los fotógrafos Ibrahim Zaher y Mohamed Aliwa, y el conductor Mohammed Nofal, quien también ejercía como asistente de fotografía según el Gobierno gazatí.Imágenes difundidas tras el ataque muestran los cuerpos de Al Sharif y Qreiquea gravemente mutilados. Posteriormente, se registró el traslado de uno de los cadáveres en medio de cánticos religiosos.Con estas muertes, el número de trabajadores de prensa fallecidos en Gaza desde el inicio de la ofensiva israelí asciende a 237, según autoridades locales. La lista incluye periodistas, fotógrafos, creadores de contenido e ‘influencers’.Israel mantiene vetada la entrada de prensa internacional al enclave, lo que convierte a Al Jazeera en uno de los pocos medios que documentan la guerra desde dentro. La cadena, cuya señal está prohibida en territorio israelí, acusa al Gobierno de atacar deliberadamente a sus equipos.LAURA CAMILA RAMOS CONDECon información de EFE*NOTICIAS CARACOL
Como todos los domingos, en este capítulo de Los Informantes, tres grandes historias: la trágica vida de la monja colombiana Inés Arango, que su compromiso indígena la llevó a un destino heroico y la acerca hoy a la santidad; el testimonio Yasuaki Yamashita, uno de los sobrevivientes de la bomba atómica en Nagasaki; y la historia de Lali Fernando Riascos, un joven afrocolombiano del Pacífico que, pese a la pobreza y la violencia, se ha convertido en un influyente creador de contenido y líder, inspirando a su comunidad con esperanza y resiliencia.La monja colombiana Inés ArangoLa monja colombiana Inés Arango dedicó casi diez años de su vida a vivir entre comunidades indígenas de la Amazonía ecuatoriana, entregada por completo a su vocación religiosa y a la misión de servir a los más olvidados. Su compromiso y humildad la convirtieron en un símbolo de fe, aprendiendo sus lenguas y costumbres, adaptándose plenamente a su entorno. A pesar de los riesgos, nunca dudó en responder al llamado divino, consciente de que su destino podría ser fatal.Su vida terminó trágicamente el 20 de julio de 1987, cuando junto al monseñor Alejandro Labaka intentaron establecer contacto con la aislada y feroz comunidad Tagaeri en la selva ecuatoriana. Ambos fueron asesinados brutalmente por esta tribu. Su martirio ha sido reconocido por la Iglesia y se espera que por su labor sea beatificada.Sobreviviente bomba atómica 80 años despuésEl 6 de agosto de 1945, Hiroshima fue arrasada por una explosión que cambió para siempre la historia de la humanidad. Tres días después, Nagasaki sufrió el mismo destino. Yasuaki Yamashita es uno de los pocos sobrevivientes japoneses que conserva intacta la memoria del horror de la bomba atómica.“Vino una luz tremenda, es como si fuera mil relámpagos al mismo tiempo. Entonces mi madre me haló al suelo, me cubrió con su cuerpo. Vino una explosión tremenda, muy fuerte y sentíamos que estaban volando miles de cosas encima de nosotros”, recordó en Los Informantes, ese aquel fatídico día.Con un testimonio en perfecto español, relata con detalle cómo vivió aquella explosión y su relato sobre la destrucción total, las pérdidas humanas y las secuelas de la radiación son un llamado urgente a la conciencia global para evitar que se repitan los horrores nucleares.La voz del PacíficoLali Fernando Riascos nació y creció en una de las regiones más azotadas por la violencia y la pobreza. Desde niño enfrentó desplazamientos, la ausencia de servicios básicos y la violencia armada que marcó su infancia y adolescencia. Sin embargo, lejos de rendirse, encontró en la comunicación y en las redes sociales un camino para mostrar sin filtros la realidad de su tierra y para inspirar a su comunidad.Es uno de los 30 colombianos menores de 30 años que están cambiando el mundo, según la revista Forbes. Hoy, impulsa proyectos que promueven la paz, el desarrollo y la dignidad en el Pacífico colombiano. A través de videos, mensajes y acciones concretas, busca visibilizar las necesidades y potencialidades de su región, animando a otros jóvenes a luchar por sus derechos y a creer en un futuro diferente.
Centenares de exmilitares colombianos se han unido a un ejército paramilitar involucrado en una guerra civil en Sudán, África. Según Naciones Unidas, es la peor crisis humanitaria del planeta, en donde se han cometido toda clase de crímenes de guerra y ha dejado más de 12 millones de desplazados. Videos desconocidos, testimonios y documentos de los exmilitares en Sudán muestran la crueldad de una guerra en la que las víctimas civiles se cuentan por millones, y donde los colombianos hacen parte de uno de los bandos genocidas.En la secuencia de video conocida por la Unidad Investigativa de Noticias Caracol, se ve a un grupo de exmilitares colombianos. Hacen parte de un contingente que ha llegado a Sudán a unirse a las filas de las Fuerzas de Apoyo Rápido o FAR, una facción paramilitar que desde hace dos años está en una guerra civil contra el régimen militar que gobierna a ese país, sobre todo en la región de Darfur.En las grabaciones, se puede ver a un grupo de colombianos atrincherados, bajo intenso fuego enemigo, intentando rescatar a un compañero herido. "Cayó Pelusa, el Flaco quedó allá... no lo pudimos ver", se escucha decir a uno de los hombres mientras se reagrupan y hacen un conteo de bajas.En el video se observa que dos hombres sostienen al colombiano herido que antes estaba tendido en el suelo, mientras se escuchan disparos a la distancia. "¿Entre quiénes nos van a ayudar a sacar? No dejemos botados a esos guevones", se escucha en el clip. Con un precario inglés, el exmilitar colombiano pide ayuda a varios integrantes paramilitares: "My friend, compa, two two two. Pa' que nos ayuden acá a apoyar a estos manes.. Vamos a ir replegando pa' sacar a este man...Ese es el problema". La disparidad de los bandos es evidente. Los mercenarios colombianos, con mejor equipo y uniformes, contrastan con sus aliados de las RSF, que combaten en chanclas y con turbantes en lugar de cascos. La intensidad del combate obliga al grupo a refugiarse en una casa. Uno de ellos, en medio del tiroteo, confiesa que ni siquiera en Ucrania vivió una situación tan crítica. "Tienen muy bien fortificada esa hijueputa", grita, frustrado por la solidez de las defensas enemigas. La comunicación por radio revela la desesperación por repeler el ataque con lanzagranadas RPG y la esperanza de poder evacuar el sitio. El militar colombiano da instrucciones para atacar una edificación enemiga. "Por dónde es la salida.. Salieron los dos que están acá, los otros alcanzaron a morir, yo creo que allá abajo. Mi primero está herido y creo que Taylor está herido.. Él se quedó reforzándonos para salir, los demás murieron allá", se escucha. Lo que hay detrás de la crueldad de la guerra en SudánEscenas de una guerra en África, que tiene como protagonistas a centenares de mercenarios colombianos, se repiten desde hace más dos años, cuando llegaron los primeros contingentes de exmilitares colombianos a Sudán, en donde se libra una guerra en la que se han cometido toda clase de atrocidades. Así lo explica Juan Pappier, subdirector de la división de las Américas de Human Rights Watch, organización que actualmente tiene investigadores en Sudán y en Emiratos Árabes."El conflicto armado en Sudán lleva más de dos años, es una de las peores crisis humanitarias del siglo XXI. Las Fuerzas de Apoyo Rápido y las fuerzas armadas de Sudán han cometido atrocidades generalizadas, incluyendo ejecuciones extrajudiciales, violencia sexual, saqueos. Nosotros hemos documentado en Human Rights Watch crímenes de guerra, limpieza étnica y hemos pedido que esto se investigue como un posible genocidio", dijo.El drama de estos mercenarios se hizo público en el escenario internacional el pasado 3 de agosto, cuando un diplomático sudanés, Ammar Mahmoud, publicó un trino explosivo. Acusó a los Emiratos Árabes Unidos de "contratar mercenarios colombianos para asesinar civiles en Darfur". Un día después, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Sudán reforzó la denuncia, afirmando tener "pruebas y documentación irrefutables" de la participación de colombianos financiados por Abu Dabi.Estas "pruebas" son, en gran parte, fotografías y videos recuperados del teléfono de un exmilitar colombiano muerto, que fueron difundidos por el canal Al Jazeera. La tensión aumentó cuando la televisión estatal sudanesa anunció que un avión de los Emiratos, con 40 mercenarios colombianos a bordo, había sido derribado, aunque la información fue desmentida poco después. Ante este panorama, el presidente Gustavo Petro insistió en su propuesta de una ley que prohíba el mercenarismo, una muestra de que el problema no es nuevo, pero que ahora ha alcanzado una dimensión pública sin precedentes.Los cuerpos de exmilitares que nadie reclamaAunque estos son los episodios más recientes, la realidad es que en Colombia el problema de los mercenarios en Sudán estalló desde noviembre de 2024, cuando se conocieron unas imágenes de documentos de colombianos muertos en combates en ese país. En ese momento, el entonces canciller gilberto murillo pidió la repatriación de los cuerpos: "Estamos en el proceso de que ojalá pudiéramos recuperar los cadáveres".Sin embargo, esto no ocurrió. Militares que están en Sudán le aseguraron a Noticias Caracol que más de 20 cuerpos de militares que murieron en esos combates están guardados en neveras hace más de ocho meses. Detrás de esta historia de mercenarios colombianos hay un entramado de empresas legales y de reclutadores que ven los conflictos del mundo como un gran negocio.UNIDAD INVESTIGATIVANOTICIAS CARACOL
El Servicio Geológico Colombiano (SGC) reportó un sismo de magnitud 4,9 hacia las 7:16 de la noche de este domingo 10 de agosto. Tuvo como epicentro El Dovio, Valle del Cauca, y se sintió en ciudades como Cali, Neiva e Ibagué. Las autoridades del departamento se encuentran evaluando si hay daños materiales o víctimas por el temblor. Defensa Civil Seccional Valle activó protocolos de barridos a los largo de la zona. El informe del SGC también indica que tuvo una profundidad de 131 kilómetros. "Manizales un poco fuerte", "se sintió fuerte en Pereira, pero corto", "se sintió fuerte en el sur de Cali", son algunos de los comentarios de los usuarios. Por su parte, el alcalde de Cali, Alejandro Leder, escribió en su cuenta de X: "Caleños, a las 7:16 p. m. se sintió un sismo en varios sectores de Cali. El epicentro fue en El Dovio, Valle. De inmediato, junto con @RiesgoCali y los organismos de socorro, iniciamos un barrido por la ciudad: no hay afectaciones ni situaciones de riesgo. Seguimos en monitoreo permanente".Este domingo también se presentó otro sismo de magnitud 3.9, con una profundidad superficial menor a 30 kilómetros, en el municipio de Uribe, en el departamento del Meta. Por el momento tampoco se han reportado afectaciones. ¿Por qué tiembla tanto en Colombia?El país se encuentra en una zona de alta actividad sísmica debido a la interacción de las placas tectónicas Nazca, Caribe y Suramericana. Este choque constante provoca movimientos en la corteza terrestre, generando sismos frecuentes. Además, Colombia tiene muchas fallas geológicas que también contribuyen a la sismicidad.El SGC se encarga de monitorear y estudiar estos sismos usando tecnología avanzada para detectarlos y analizarlos. Publican informes y mapas geológicos que nos ayudan a entender mejor cómo funciona la tierra en Colombia. Por su parte, la Unidad de Gestión del Riesgo (UNGRD) implementa estrategias y planes para reducir el impacto de los desastres naturales. Su meta es fortalecer la capacidad de respuesta de las comunidades ante los sismos, lo que incluye educar a la población y construir infraestructura sismorresistente.Las autoridades reiteran la importancia de mantener la calma ante estos eventos y seguir las recomendaciones de seguridad, como identificar zonas seguras en viviendas y lugares de trabajo, tener a la mano un kit de emergencia, y estar atentos a los canales oficiales de información.¿Qué hacer en caso de sismo?El Servicio Geológico Colombiano y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) recomiendan las siguientes acciones ante un sismo: Mantener la calma y evitar correr.Ubicarse en zonas seguras previamente identificadas (estructuras reforzadas, bajo marcos de puertas, lejos de ventanas).No usar ascensores durante el evento.Después del sismo, verificar el estado de las instalaciones eléctricas y de gas.Reportar cualquier daño estructural a las autoridades competentes.El SGC continúa monitoreando la actividad sísmica en todo el territorio nacional a través de su red de estaciones sismológicas. Los reportes oficiales pueden consultarse en tiempo real en su portal web.NOTICIAS CARACOL
Este domingo, en el Exploria Stadium, Orlando City recibió a Inter Miami por la MLS y el colombiano Luis Muriel se reportó con un golazo en el comienzo del juego. A los dos minutos, Martín Ojeda filtró un pase en ataque a Muriel, quien hizo un control perfecto y sacó un buen remate de pierna derecha para vencer el arco defendido por Óscar Ustari. El atacante atlanticense viene en una racha positiva frente al arco rival, con su equipo estadounidense.Vea el gol de Luis Muriel en Orlando City vs. Inter Miami, por la MLS
Con tan solo 17 años, Santiago Londoño se ha ganado un lugar en la conversación sobre las grandes promesas del fútbol colombiano. El delantero, formado en la cantera de Envigado, ha demostrado en poco tiempo que tiene el talento, la personalidad y el olfato goleador necesarios para dar el salto a ligas más competitivas.Su proyección comenzó a tomar fuerza tras su destacada participación con la Selección Colombia Sub-17 en el Sudamericano de la categoría, disputado en el país. En aquel torneo, Londoño anotó cinco goles, convirtiéndose en pieza clave para que la ‘tricolor’ asegurara su clasificación a la Copa del Mundo. Sus actuaciones no solo encendieron la ilusión de los aficionados, sino que también captaron la atención de varios clubes internacionales que ya siguen de cerca su evolución.De regreso a su club, el joven atacante no tardó en dejar huella en el profesionalismo. En la sexta fecha de la Liga BetPlay, Santiago Londoño marcó su primer gol en la máxima categoría del fútbol colombiano. Lo hizo en el Polideportivo Sur de Envigado, en un compromiso frente al Junior de Barranquilla, confirmando que su talento no es exclusivo de torneos juveniles.¿Santiago Londoño rumbo a Europa?El futuro de Santiago Londoño podría dar un giro importante. En las últimas horas, surgió el rumor de que el delantero antioqueño estaría cerca de emprender su primera aventura internacional, con destino al fútbol europeo. Según la información del periodista mexicano Uriel Lugt, el atacante habría sido vendido al Grupo Pachuca, conglomerado que es propietario de equipos como los 'tuzos' y el León, este último donde milita James Rodríguez.Sin embargo, el plan no sería incorporarlo de inmediato a la Liga MX. El acuerdo contemplaría que Londoño viaje a España para jugar en el Real Oviedo, equipo recientemente ascendido a la Primera División, y que también hace parte del grupo inversor. Allí compartiría vestuario con figuras de renombre como el español Santi Cazorla y el venezolano Salomón Rondón.“#Envigado acordó la venta de Santiago Londoño a Grupo Pachuca. El club colombiano vende el 70% del pase. El delantero se queda hasta fin de año y a comienzos de 2026 jugaría en #RealOviedo”, publicó Lugt en su cuenta de X.Se estima que Envigado recibiría por Santiago Londoño una cifra cercana a los 1,5 millones de euros. De concretarse el traspaso, Santiago Londoño tendría la oportunidad de medirse en una de las ligas más competitivas del mundo, lo que supondría un paso clave en su desarrollo profesional. La adaptación a un fútbol más físico y táctico será uno de los retos más importantes, pero su talento y capacidad de definición lo convierten en un proyecto de jugador que podría consolidarse en el Viejo Continente.Por ahora, Londoño seguirá defendiendo los colores de Envigado, club que históricamente ha sido semillero de figuras del balompié colombiano que pelea por mantener la categoría.
El pasado 5 de agosto, hacia las 3:30 de la tarde, Harold Aroca, un joven de 16 años, fue interceptado por cinco hombres en un sector de Bogotá. Uno de ellos portaba un arma de fuego. De acuerdo con su madre, Carolina García, y basándose en un video que, aparentemente, fue grabado por un vecino. En la grabación se puede observar cómo los sujetos le hicieron un reclamo verbal antes de cubrirle la cabeza con una capucha, subirlo a un carro y llevárselo por la fuerza. Esa misma noche, alrededor de las 9:00 p. m., el padre de Harold comenzó a sospechar que algo no estaba bien: los mensajes que llegaban desde el celular de su hijo no correspondían a su forma habitual de escribir. Poco después, recibió una llamada en la que una voz desconocida le dijo que el joven había tenido problemas y se lo habían llevado. El teléfono estuvo activo hasta las 10:00 p. m.Carolina García, quien reside en Cali, se enteró de lo ocurrido al día siguiente y viajó de inmediato a Bogotá. El jueves, el Gaula de la Policía realizó un operativo en la zona donde se presumía que tenían al joven, pero las autoridades se retiraron tras un intercambio de disparos. Ese mismo día, en un barrio cercano, se realizaba el entierro de una persona asesinada días antes. Según la madre, Harold había comentado en el colegio que sabía quién había cometido ese homicidio, lo que podría estar vinculado con su desaparición.El viernes, la familia recibió rumores de que iban a matar al joven. En redes sociales, alguien escribió: “Búsquelo en el bosque”. Al informar a las autoridades, un uniformado les aseguró que ese lugar estaba bajo vigilancia permanente con drones y patrullas, y que allí “no pasaba nada”.Sin embargo, el sábado 9 de agosto, familiares y amigos organizaron una velatón y decidieron entrar al bosque señalado en redes. Allí, detrás de unos tanques y a apenas 20 metros de la zona que la policía consideraba segura, hallaron el cuerpo sin vida de Harold.Según relató su madre, el cuerpo estaba en muy mal estado y presentaba claros signos de violencia: marcas en las muñecas que indicaban que había sido amarrado y varias heridas de bala. “Tenía disparos, pero no sé decir cuántos ni en qué lugares”, declaró.El crimen ha generado consternación y repudio en la comunidad, que exige respuestas claras y celeridad en la investigación para identificar y capturar a los responsables.El Alcalde de Bogotá se refirió al casoTras conocerse el hallazgo, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, se pronunció en la tarde del 10 de agosto y lamentó profundamente el hecho. Además, expresó que “ningún compromiso puede ser mayor que el de proteger la vida e integridad de niños, niñas y adolescentes”. Recordó que desde el 6 de agosto, cuando se conoció la desaparición de Harold en el barrio Los Laches, se activó a la Policía a través del Gaula, Sijin y Sipol, y se brindó acompañamiento a la familia por parte de la Dirección de Derechos Humanos y el equipo Aide de la Secretaría de Seguridad. “Cada muerte violenta de un menor es un fracaso de todos como sociedad. He pedido a las autoridades que adelanten todas las investigaciones para esclarecer lo sucedido y dar con los responsables. No podemos aceptar más casos como este ni seguirles fallando a nuestros niños y niñas”, añadió.LAURA CAMILA RAMOS CONDE NOTICIAS CARACOL
Isco Alarcón, media punta del Betis, expresó este domingo que no tiene "nada que reprochar" al centrocampista del Málaga David Larrubia por la entrada que supuso la fractura de peroné sufrida por él en el amistoso de este sábado, porque "solo es un lance de juego como los cientos que hay cada partido"."Nada que reprocharte, amigo, solo es un lance de juego como los cientos que hay cada partido. Un abrazo y buena suerte esta temporada", escribió Isco a Larrubia en su cuenta oficial de X, en medio de la polémica por la falta que provocó la lesión del internacional español que milita en el equipo dirigido por el chileno Manuel Pellegrini.Larrubia ya había pedido este domingo disculpas a Isco por la entrada: "Todo el que me conozca sabe que jamás iría a lesionar, ni siquiera a hacer daño a un compañero de profesión y mucho menos al que ha sido y es un ídolo para mí"."Lo primero de todo, volver a disculparme con Isco Alarcón y desearle pronta recuperación y que no sea nada grave. Estoy recibiendo muchísimos insultos por las redes (algunos muy dañinos) de los cuales creo que no soy merecedor de ellos", añadió Larrubia sobre el futbolista verdiblanco.El jugador del Málaga recordó que fue "una acción fortuita", en la que pensaba que llegaba "rápido y a tocar balón limpio". "Pero Isco, de lo bueno que es, mete el cuerpo y le doy la patada a él", continuó."Nada más terminar la acción, me preocupo por él, y al pitar el descanso más de lo mismo, ya que aun siendo fortuita, sé que la acción en sí fue dura. Solo quería dejar claro que jamás iría a hacer daño a un rival y menos a Isco, que lo disfruto cada semana viéndolo jugar", agregó.Isco sufrió en ese lance "una nueva fractura sin desplazamiento en el tercio medio de su peroné izquierdo", según informó el Betis "tras las pruebas médicas realizadas"."Se trata de una nueva lesión traumática que no tiene relación con el proceso previo, el cual quedó resuelto", añade el parte médico.El informe del Betis, que no especificó el periodo de baja del futbolista, aunque este tipo de lesiones pueden requerir unos tres meses de recuperación, indicó que "el jugador se someterá a un tratamiento conservador en las próximas semanas y su reincorporación dependerá de la evolución del proceso".
El mercado de fichajes todavía tiene 21 días de vigencia para hacer transferencias y uno de los jugadores más sonados es Carlos Cuesta. El defensor colombiano no hace parte de los planes de Galatasaray, luego de un semestre en el que nunca pudo consolidarse y en el que la hinchada de los turcos le dio palo por los mostrado en la cancha. El exGenk es seguido desde hace varios días por dos clubes y deberá decidirse entre seguir en Europa o volver a Sudamérica. En el 'viejo continente' el club que desea ficharlo es el Spartak Moscú, uno de los más importantes de Rusia. En nuestro continente el que lo quiere es Vasco da Gama, escuadra brasileña que ya tiene en sus filas a otro colombiano: Carlos Andrés 'Uvita' Gómez. Pues bien, la prensa turca reveló nuevos detalles y dejó en claro que uno tiene ventaja. “Galatasaray anunciaría la salida de Carlos Cuesta entre mañana y el martes. El jugador será transferido al Spartak de Moscú”, fue la información que reveló el periodista Suleyman Rodop.De esta manera, todo apunta a que el nacido en Quibdó desea mantenerse en Europa así no sea en una de las grandes ligas. Con los 'leones', Cuesta apenas disputó nueve encuentros desde enero de este año, acumulando 626 minutos. ¿Cuáles son los jugadores colombianos en la actual Liga de Rusia?Jhon Córdoba (Krasnodar), Mateo Casierra (Zenit), Wilmar Barrios (Zenit), Daniel Ruiz (CSKA de Moscú), Kevin Andrade (Baltika) y Juan Camilo Castillo (FC Pari).Los números de Carlos Cuesta en otros equiposEl defensa tuvo un papel destacado tanto en Atlético Nacional como en KRC Genk. En Nacional disputó 73 partidos, recibiendo 10 amarillas y consolidándose en defensa. En Genk sumó 182 encuentros, con 4 goles, 1 asistencia y 26 amarillas, mostrando regularidad y liderazgo en la zaga, además de una notable presencia internacional.